Trilogía Love Me With Lies: no todas son mentiras.

La Oportunista:

Me pareció un libro hilarante, los personajes estaban completos y muy bien desarrollados. Me identifiqué un montón con Olivia y no sé...le he tomado bastante cariño ya que es una versión mía pero crecida. Sé que el siguiente libro me explicará mejor lo que pasó entre el hueco del arrepentimiento de Caleb (que me dejó bastante wtf) y su boda con Noah, que también me dejó bastante wtf. Espero leer Dirty Red muy pronto y apenas lo comience sé que lo acabaré en nada. Espero que la trilogía siga así de bien, estoy muy emocionada. 


Sucia Pelirroja:

Se me hace muy dificil explicar lo que siento por este libro. Es una extraña mezcla de odio, amor, tristeza, lástima, y furia. A pesar de que detesto con todas mis fuerzas a la narradora este libro me ayudó un poco a entender la razón por la que se aferra a Caleb (sin contar a Estella, que no me quedó bien en claro si era hija de él o de Seth) y es un personaje demasiado dependiente. La típica "¡Aliméntame y dime lindura!". Soportarla durante el libro fue agobiante, no dejaba de tener ganas de entrar al libro y golpearla y al leerlo de noche, parecía que estaba hablado sola. También resalto que con este libro me decepcioné un poco de Caleb pero fue para bien, no sé si me explico. Esta saga se resalta por tener personajes reales que te puedes encontrar en el mundo de hoy en día y Caleb demostró ser real y no un muñeco Ken de plástico, como se pintaba en The Opportunist. El final me ha dejado impactada, estaré leyendo Thief hoy (aunque lo pude hacer ayer, pero tenía mucho sueño) y acabaré con esta desquiciada trilogía. Hasta ahora, me encanta.

Ladrón:

A pesar de que fue un libro largo, todo pasaba muy seguido. Era acción sin descanso (en todos los sentidos 7u7) y no te dejaban tiempo para asimilarlo todo. Aunque se haya confirmado que Estella sea hija de Caleb, yo sigo pensando que es de Seth. Olivia fue mucho más ***** en este libro, y eso me encanta, ya que fue ella en su máxima expresión. Además, los berrinches de Leah fueron todo, eran demasiado graciosos y de hecho me provocaron varias carcajadas. Así, he llegado al final de la saga y sinceramente la amé de aquí hasta Luna de Plutón, no pudo haber acabado mejor.








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